Recorrido circular a la Peña Careses en sentido antihorario, partiendo del barrio de La Quintana en Careses y pasando por la bonita cueva de San Pedrín.
La Quintana (260 metros) - Cueva de San Pedrín (300 metros) - Peña Careses (552 metros) - Túnel de La Viona (320 metros) - Ordiales (350 metros) - La Quintana (260 metros).
Por la carretera AS-248, que desde Gijón se dirige por La Collada hasta Pola de Siero, hay que desviarse a la izquierda a la altura del km 18 en Muncó. Por una estrecha carretera local, se cruza Villanueva y Careses hasta el barrio de La Quintana, a la salida de él y en un amplio cruce, es posible dejar el vehículo sin entorpecer la circulación.
Desde aquí tomamos el camino de la derecha, que cruza las verdes llanuras de La Parte, con la silueta caliza de Peña Careses al frente. Llegamos al Caserío de Moyeos, para girar hacia el Este por el pequeño túnel de Aveno que pasa bajo la Peña Castañera, forma parte del antiguo trazado del Ferrocarril San Martín del Rey Aurelio - Lieres - Gijón, ahora convertido en Senda Verde La Viona (PR AS-277). Comienza en el pueblo de Solvay, tras unos 9 kms de recorrido y concluye a la entrada del túnel que estamos cruzando. Seguimos durante algo mas de 1 km hasta Castañera para pasar por debajo de la carretera AS-233 y nos desviamos a la izquierda por un camino (está indicado) que nos conduce a la singular cueva de San Pedrín.
La Cueva de San Pedrín, es un túnel kárstico con orientación Norte - Sur de unos 80 metros de longitud, que está surcado por el río Rufiañu. Posee un encanto natural innegable y se deduce por investigaciones recientes que fue habitada por hombres primitivos. A unos 300 metros de la cueva y hacia el Norte, se encuentra la capilla de San Pedrín cuyos orígenes llegan al año 1.122, se dice que hace bastante tiempo aparecieron imágenes religiosas dentro de la Cueva, entre ellas una figura pequeña de San Pedro (de ahí San Pedrín), fueron llevadas a la iglesia de Narzana, pero a los pocos días aparecía la figura en el "prau" de la Capilla, así una y otra vez. En este entorno se celebra desde hace años, una fiesta muy popular que está declarada de Interés Turístico Regional, se concentra durante 5 días en el tercer fin de semana de Agosto y tiene un variado programa de actividades; desde la bajada del Santo de la Capilla hasta la Cueva, para celebrar una misa cantada en asturiano, hasta actuaciones corales dentro de ella, campeonato internacional de moto-cross, desfile de carrozas, verbenas, "Cancios de Chigre", fuegos artificiales, etc. Todo un sinfín de actividades que merece la pena conocer.
De vuelta a la carretera, seguimos por la carretera AS-331 que cruza Castañeda en dirección a Peón por el collado de La Fumarea. Durante poco mas de un kilómetro seguimos por ella hasta alcanzar la cantera, es objeto de polémica por su impacto ambiental, así como por la cercanía a las viviendas de Castañeda. Una vez superadas las instalaciones y en una curva a derecha, nos desviamos a la izquierda por un sendero que se interna en el bosque, mientras a nuestra derecha, tenemos una alambrada que limita una de las zonas de la cantera. El camino perfilado entre fincas, nos lleva en dos revueltas a una portilla que da acceso a los pastos cimeros, sobre los que destaca a la derecha la cruz de la cima. Alcanzada la cresta de la peña, solo nos queda recorrer hacia el Oeste unos aéreos 100 metros, para culminar sin dificultad su cumbre.
Una cruz de mas dos metros de altura, un buzón para tarjetas y una placa con el nombre de la peña, presiden desde la cima sus infinitos horizontes. Su modesta altitud no es obstáculo, para que alcanzemos a ver toda la zona central asturiana, con el verdor que se impone por debajo de lomas y montañas. Los "Picos", las cumbres de Piloña, la alargada sierra de Peña Mayor, la figura piramidal de Peña Mea, la Cordillera Cantábrica, el Macizo de Ubiña, el Aramo, el Monte Naranco, el Pico Gorfolí y el Cerro Gavio con el Fario al Norte, son en sentido circular, lo mas visual de este gran mirador que es la Peña Careses.
Descendemos hacia la portilla que nos dio acceso a la zona cumbrera, para continuar a la izquierda dando dirección circular a nuestro recorrido. Bordeamos la peña siguiendo un camino en ocasiones estrecho y bastante cerrado, que desciende luego en dirección Sur una vez superada una portilla. Pasamos por ella a un prado en forma de vaguada que concluye en un bosque, por el que discurre un vertiginoso sendero empedrado, que nos lleva a enlazar con el PR AS-216 denominado Camín de Careses.
Aquí hay que detenerse para bajar unos metros hacia la bonita Fuente La Xana y su Área Recreativa, volvemos de nuevo junto a la señalización del PR y caminamos unos metros entre la vegetación, para llegar a la boca del túnel que tiene sobre un kilómetro de longitud, y que por debajo del Pico Castiello sale a La Collada, en lo que fue un proyecto del siglo XIX, que pretendía unir por ferrocarril San Martín del Rey Aurelio, con el puerto del Musel a través de Lieres. Después de 15 años de trabajos, en los que además de mucha obra civil con puentes y túneles, se llegaron a adquirir locomotoras y hacer estaciones como la de La Collada (hoy transformada en vivienda), todo ello derivó en numerosas dificultades económicas, tanto por el tamaño del proyecto, como por las incertidumbres políticas de la época. Finalmente, en Agosto de 1916 la sociedad quebró, siendo el túnel de La Viona (o de La Collada) uno de los recuerdos de aquella aventura que fue inmortalizada en la famosa canción de tonada "hay una línea trazada". Hoy se puede cruzar por él, aunque no es aconsejable pues existe riesgo de algún derrumbe, que ya existe; está además aprovechado por Cadasa para la conducción de aguas hasta los depósitos de Roces en Gijón.
De nuevo en el PR, seguimos hacia el Oeste por un camino que sube entre lindes hasta Ordiales, después de cruzar sus soleadas casas, descendemos hacia el sur en busca de nuestro punto de partida en el barrio de La Quintana, principio y fin, de este atractivo recorrido por las vegas de Siero y Sariego.