DESCRIPCIÓN DEL ITINERARIO
La ruta comienza en el pueblo de Pelúgano, en el concejo de Aller, un pequeño núcleo rural colgado en la ladera, donde el tiempo parece avanzar a otro ritmo ⏳. Las casas de piedra, los hórreos bien conservados y los prados que lo rodean crean un ambiente asturiano auténtico 🌿, perfecto para iniciar una ascensión de montaña como la de Peña Mea ⛰️.
Desde el pueblo, el camino arranca por una pista ganadera que enseguida se convierte en un sendero de montaña 🚶. La pendiente se hace notar desde el principio, pero el entorno ayuda a sobrellevar el esfuerzo: a un lado, el rumor de pequeños regatos que descienden desde lo alto 💧; al otro, las peñas escarpadas que anuncian que estamos entrando en terreno de altura 🪨.
A medida que se asciende, el paisaje cambia. Los prados dan paso a zonas más rocosas y abiertas, y comienza uno de los tramos más singulares de la ruta: la Canal de las Cuevas 🧗. Se trata de una subida empinada entre paredes de roca, donde el sendero serpentea de forma estrecha y en la que se hace inevitable echar mano de la roca para mantener el equilibrio en algunos puntos. Aquí la montaña se muestra imponente, y la sensación de estar entrando en su corazón es total ❤️.
Tras superar la canal, aparece ante nosotros uno de los lugares más mágicos de la ruta: el Ojo de Buey 👁️🐂. Esta formación natural, un gran arco de piedra abierto en la roca como una ventana al paisaje 🪟, es uno de los símbolos de la zona. Desde allí se domina buena parte del valle y, en días claros, incluso se intuyen los contornos de otras sierras más lejanas 🏔️. Fue aquí donde hicisteis una parada para comer 🍽️, en un entorno de auténtico privilegio: a los pies del arco, sobre la hierba, con el cielo abierto por techo ☁️ y las paredes calizas como refugio natural 🏕️.
Tras el descanso, el camino continúa hacia la cima. Queda el tramo final, el más alto, donde el sendero se afila entre rocas sueltas y algún paso expuesto ⚠️. El esfuerzo se ve recompensado en cuanto se alcanza la cumbre de Peña Mea, a 1.557 metros 🏔️. Desde allí, las vistas son extraordinarias: hacia el norte, el concejo de Laviana y los valles centrales de Asturias; hacia el sur, la silueta de Peña Redonda, la Sierra del Aramo y otras cumbres de la cordillera 🌄.
La bajada se realiza por el mismo sendero, permitiendo redescubrir los mismos rincones desde otra perspectiva 🔁. El Ojo de Buey, esta vez al descender, aparece casi de sorpresa, enmarcado por la vegetación y la roca 🌿. La Canal de las Cuevas, ahora de bajada, exige precaución 🧍♂️, pero deja un sabor de aventura difícil de olvidar 🎒.
Ya en Pelúgano, la vuelta al pueblo cierra una ruta exigente, pero de las que dejan huella ✨. Un recorrido que combina esfuerzo, belleza natural, historia geológica y paisajes de altura. Peña Mea desde Pelúgano no es solo una subida: es una experiencia completa de montaña asturiana en estado puro 🌄💚.